No soy experta en nada de nada, sin
embargo, muy tímidamente, me atrevo a opinar que, la creación de obras artísticas
y la contemplación de las mismas se ha ido evaporando ante miles de poses como
son, entre otras, la de los que fungen como maestros de arte y la de los
críticos; hay que posar de sabio de arte, hay que posar de persona adinerada
para, en la mayoría de los casos, poder lanzar algún juicio y, si no es así, al
espectador del común se le exige silencio. Hoy la cualidad del asombro ante lo
bello y la mirada subjetiva como características fundamentales del
admirador-contemplador, definitivamente, han desaparecido.
Ana Lucía Montoya Rendón
abril 20, 2016
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Bienvenida aquí, tu huella.